Hay dos maneras de conseguir la
felicidad, una, hacerse el idiota y otra
serlo. ¿Cuál es la tuya?
No me llames egoísta simplemente porque no seguí tus reglas y jugué a tu juego... de todas formas hace tiempo que me dí cuenta de que no era un juego y estaba enamorada. ¿Qué más da, no? Ya todo está muy lejos, ya no se puede volver...y aunque pudiera volver a elegir, me volvería a equivocar de nuevo.
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